Indigenous populations

One day, I was talking to a very good Colombian friend of mine. He told me a story that I will always remember. I will try to briefly summarize it:

‘‘When the Spanish arrived to America and met the local indigenous populations, they were interested in the resources of the land. Among others, they found precious metals such as silver on the continent and gold on the Colombian territory. This metal was very important to the Spanish for its economic value. But for the indigenous population of that time, it was important due to their view of the world: for them their gods were most important because they had a direct relation to the natural forces which provided them with food, materials and other essential elements for life, such as plants, animals, water and maybe the most important, the sun. For the indigenous people, the value of the gold was symbolic representing the color and the brightness of the sun.

Although it seems incredible, the Spanish owned an object that allowed the indigenous people to have the sun in their own hands, the mirror. And thus the Spanish and indigenous exchanged (in case an exchange really took place…) gold for mirrors’’.

This simple but heavy story, made me understand from a different point of view the very different mentality and principles of both cultures at that time. Today, hundreds of years later, this has changed and both cultures are not what they had been before. They have adapted to the changes of each era. And according to the history and the evidences of the present, one of the two cultures clearly prevails today, maintaining their most basic principles. This is the one named occidental related directly to capitalism, which values economic growth above everything else, promotes a cultural globalization and thus tries to neglect or make invisible the other cultures that are different than the mainstream.

Speaking from the observations and perceptions that I made while being in contact with these groups, I think that different situations in the indigenous populations are generated, .that, although they might be normal, caught my attention. This originates from the cultural globalization that has modified some specific aspects of the local and minority cultures:

–              One of these aspects is the stereotype of beauty related to physical aspects. This is promoted by the occidental world and influences a large part of the population. Another point is the personal aspect related to fashion with regard to clothes, and esthetics.

–              There are also some models or stereotypes regarding having success in life (football players, singers, actors, models, etc.), that are promoted and especially influence young people. These ideals stand in contrast to the daily and traditional indigenous life, that is more local, rural and directly related to nature.

–              And finally and directly related to my volunteering experience I also have to talk about construction materials. In relation to this last example, the priority at global level lies in the use of durable (or hard-wearing) materials, such as concrete and bricks which, due to their features, are symbols of progress in this field. Other factors, such as the use as more economic, more accessible and therefore more sustainable local materials, for most people do not have the same priority as does the durability.

With this, I am not saying that concrete is a bad option, but that it is not the only and not always the best one. And I think the same about the other topics previously presented.

In brief, what I wanted to say with this simple example is that for me, the only way that is shown to us as a synonym of development is not the only and in most cases not the best one. During my work with indigenous communities I could observe that they have developed a much better sense of cooperation and solidarity than European society, much more individualistic. That, from my point of view, is something very positive they have.

Sincerely, I think that cultural diversity is very beneficial and positive for everybody if the objective is to share, integrate and cooperate. It is more useful to learn about differences than to promote unique ways which generate inequalities that moreover increase more and more. But, is this really what the current development system promotes?

Hopefully, all the money that today is invested in promoting this development system by the media, in the future will be invested in a quality education in the countries and regions, where the situation is more precarious, that usually are those countries named ‘‘developing countries’’. Of course it would be an education planned and leaded by the local people with their participation, respecting and valuing their cultural identity and features. In the end, education is what defines who we are, and that make us more conscious about our identity, reality and our rights in addition to develop our capacities.

This idea could seem a utopia but sincerely, I think we need to believe in some utopia due to the reality we live. Otherwise some unfair situations will never change.

Jorge Núñez

Poblaciones indígenas

Un día hablando de diversos temas, un muy buen amigo colombiano me conto una historia que creo que se me quedará grabada para toda lo vida. Haré un resumen rápido de la misma, la historia decía algo así:

‘‘Cuando lo españoles llegaron a América y se encontraron con las poblaciones indígenas locales, se interesaron por los recursos que había en esas tierras. Entre ellos por supuesto, estaban los metales preciosos como la plata a nivel continental y también el oro en el territorio colombiano. Este metal era muy importante para los españoles por su valor económico. Mientras, para los indígenas de la época por su cosmovisión, lo importante eran sus dioses directamente relacionados con las fuerzas de la naturaleza que les proveían de alimento y otros materiales o elementos necesarios para su vida como son las plantas, los animales, el agua y otro de los más importantes para ellos, el sol. Para los indígenas, el valor del oro era simbólico y  representaba por su color y brillo al dios sol.

Pues bien, aunque parezca increíble, los españoles poseían un objeto que permitía que los indígenas pudieran tener el sol en sus propias manos, el espejo. Y de esta forma los españoles e indígenas intercambiaron (en los casos que realmente existía un intercambio…) espejos por oro’’.

Esta simple pero dura historia, me hizo comprender desde otro punto de vista claro, la distinta mentalidad y principios de ambas culturas en ese entonces. Hoy en día, tras cientos de años esto ha cambiado y ambas culturas ya no son lo mismo que entonces porque se han ido adaptando a los distintos cambios de cada época. Y según la historia y las evidencias de la actualidad, hoy en día predomina claramente una de esas dos culturas que se encontraron en ese entonces conservando sus principios más básicos. Esta es la denominada occidental directamente relacionada con el capitalismo, que valora el crecimiento económico por encima del resto de cosas, la que promueve una globalización cultural y que por tanto trata de anular o hacer invisibles el resto de culturas frente a la corriente o tendencia principal.

Hablando desde mi observación y percepción en contacto con estos colectivos, se generan distintas situaciones en las poblaciones indígenas que aunque son habituales me llaman la atención. Esto se debe a que la fuerza de esta corriente globalizadora de la cultura modifica algunos aspectos propios de las culturas locales o minoritarias:

– una de ellas es el estereotipo de belleza relacionado con el físico que se promueve desde el mundo occidental y que influye a gran parte de la población. Otro es el aspecto personal  referente a moda en cuanto a la ropa y la estética.

– También están los modelos o estereotipos de éxito en la vida (futbolistas, actores, cantantes, modelos, etc.) que se promueven y llegan principalmente a la juventud. Estos ideales se contraponen a la vida cotidiana indígena, más local, rural y relacionada con la naturaleza.

. Y por último y relacionado directamente con mi voluntariado he de mencionar también los materiales de construcción.

En este último ejemplo, la prioridad a nivel global es el uso de materiales duraderos como el concreto (hormigón) y el ladrillo que por su durabilidad son símbolo del progreso en este campo. Otros factores como usar materiales locales más económicos, accesibles y por tanto sostenibles no son tan prioritarios para la mayoría de las personas, como la durabilidad.

Con esto no estoy diciendo que el concreto (hormigón) sea una mala opción, pero sí que no es la única y no siempre es la mejor. Y pienso igual del resto de temas expuestos anteriormente.

En definitiva y con este simple ejemplo lo que quiero decir es que para mí, el camino único que nos muestran como desarrollo ni es ni el único ni en la mayoría de los casos el mejor. En el trabajo con comunidades indígenas he podido observar que en el día a día tienen desarrollado un sentido de cooperación y solidaridad mucho mayor que en la sociedad europea, bastante más individualista. Esto es algo muy positivo que ellos tienen desde mi punto de vista.

Sinceramente, pienso que la diversidad cultural es algo muy beneficioso para todos si el objetivo es compartir, integrar y cooperar. Es mucho más fructífero aprender de las diferencias que promover caminos únicos que generan desigualdades que además cada vez aumentan. Pero, ¿es esto realmente lo que promueve el actual modelo de desarrollo?

Ojalá que todo lo que se invierte en promover este modelo de desarrollo desde los medios se dedicara a una educación de calidad en los países y regiones donde esta es más precaria y que suelen coincidir con los países denominados en vías de desarrollo. Por supuesto, entiendo que esta educación debería estar planificada y dirigida por la población local contando con su participación, respetando y valorando su identidad cultural y sus características. Al fin y al cabo la educación es la que nos define como personas y la que nos hace más conscientes de nuestra identidad, de la realidad y de nuestros derechos además de desarrollar nuestras capacidades.

Esta idea puede parecer utópica pero sinceramente, creo que necesitamos creer en utopías dada la realidad que vivimos. Si no es así, algunas realidades injustas que vivimos, no cambiaran nunca.

Jorge Núñez